No hay palabras para expresar la hermosa experiencia vivida antes, durante y después de la Fiesta del Divino Rostro. La preparación fue muy especial con la Novena que tanto nos ayudó. Compartíamos algunas frases de la Madre Pierina propuestas para cada día, y así las recordábamos durante el día y las comentábamos. Luego la preparación de la Capilla y el patio del colegio con tanta delicadeza, finura y solemnidad, ayudados por nuestros Colaboradores que nos acompañaron en todo con gran generosidad.
En la mañana del día de la fiesta rezamos Laudes y Misa comunitaria a las 7 de la mañana.
A las 9 de la mañana se expuso el Santísimo Sacramento, nuestros Colaboradores y un gran número de personas de diferentes lugares ya estaban allí para rezar y confesarse, y así fue durante todo el día. Mientras en grupos pasaban los escolares con sus profesores y demás personal para rezar, como es costumbre traer a los niños a la Capilla. Los niños miraban a Jesús y se dejaban mirar por Él.
El almuerzo festivo fue fraterno, con el sacerdote que nos acompañó durante todo el día, P. Emanuele, y los Colaboradores FIC, mientras en la Capilla la gente seguía rezando y adorando al Señor, con Súplicas al Divino Rostro y sus propias oraciones.
Por la tarde estaba a rebosar de gente de todas las edades, incluso una hora antes de la misa, que era a las 16.30, mientras la gente seguía rezando y confesándose con los sacramentos. La capilla estaba abarrotada, incluso el pasillo… todo en silencio y devoción.
La Celebración fue solemne y participaron en las lecturas y cantos…. Muchos se acercaron a la Eucaristía, y en el momento de la bendición y aspersión del agua bendita, todos se arrodillaron con gran respeto, rosario en mano, estampas y medallas, para ser bendecidos.
Al final de la misa, la gente no quería irse, pedían confesarse, hablar con el sacerdote, despedirse de las hermanas, seguían rezando las súplicas, el rosario, con el deseo de volver, pero sobre todo felices de haber participado y adquirido así la indulgencia plenaria concedida en esta fiesta.

Que el Santo Rostro nos siga mirando con tanto amor.


 

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