Casa Madre. Bs. As., Argentina
Los cristianos invocamos a María como Puerta del Cielo. Ella acompaña bondadosa al Pueblo de Dios en su caminar hacia la Patria celestial.
Muchos testigos nos han precedido en este camino, cuyo ejemplo nos guía y nos impulsa. Recordamos especialmente el 2 de agosto a uno de esos testigos, la Sierva de Dios Madre Eufrasia Iaconis, Fundadora de nuestra Congregación. Ella amó profundamente a la Inmaculada, y amó también en forma muy especial a nuestra Argentina, atendiendo las necesidades de sus hijos, con la convicción de que toda vida vale.
Debido al momento especial que atravesaba nuestro país, en la Misa también hemos pedido que crezca en todo hombre el respeto a la vida, don de Dios.
La Eucaristía fue precedida por Mons. Santiago Olivera y cuatro Sacerdotes concelebrantes. Participaron Hermanas de las distintas comunidades, miembros de los Centros de Colaboradores, delegaciones de las obras apostólicas más cercanas, numerosos fieles que admiran las virtudes de la Madre Eufrasia…
Compartimos las intenciones que se elevaron ese día en la Oración de los Fieles:
A cada petición respondemos: “Por María, escúchanos Señor”.
1) Por la Iglesia, voz de los que no tienen voz: para que, fiel a su misión de iluminar las conciencias de los creyentes y de los hombres de buena voluntad, recuerde constantemente que la vida humana es un don precioso de Dios, oremos…
2) Por los gobiernos y los cuerpos legislativos de los pueblos: para que protejan eficazmente el derecho fundamental a la vida de todo ser humano, aun del no nacido, oremos…
3) Por la pronta glorificación de la Madre Eufrasia, modelo de amor por sus Hijas, por los niños, por los enfermos, por todos aquellos que el Señor colocaba en su camino, oremos…
4) Por la familia religiosa de la Hijas de la Inmaculada Concepción, para que, bajo la protección de su Fundadora, crezca siempre en número y caridad, al servicio de la Iglesia, oremos…
5) Por todas las personas que hoy se han reunido para evocar a la Madre Eufrasia y por aquellos que confían en su intercesión, oremos…
6) Por el eterno descanso de nuestros difuntos −familiares, amigos y bienhechores–, para que gocen contemplando la belleza de Cristo y de su Madre Inmaculada, oremos…